jueves, 16 de septiembre de 2010

Tirturas en la carcel U32 de Neuquen.

Neuquén
Garroterapia en la U32 de Zapala

(AW)Dos detenidos, uno que se fugo cuando el muñeco “Wilson” estaba de guardia, y otro que es testigo esencial en la causa contra 28 policías acusados de torturas, son sistemáticamente apaleados. Así lo denunciaron familiares y Zainuco


“Estoy denunciando los golpes que recibió mi hijo en la Unidad 32 de Zapala. Cuando fui el viernes a verlo estaba todo golpeado, el ojo morado, la nariz hinchada y no se podía sostener de la paliza que le había dado la policía. Lo acusaron de un motín y de que ellos se querían escapar, todo es mentira. Desde el martes hasta el jueves lo tuvieron desnudo y lo mojaban con esa manguera de los bomberos que ellos tienen y le pegaban. El tenía toda la ropa mojada, las zapatillas y el colchón. Es como el tiempo de los militares. Y todo viene a raíz que él se escapó de la Unidad 11. Y se lo llevaron a Zapala, lejos de todos. Yo no quiero que me lo maten y me lo entreguen en un cajón”. Con este dramatismo habló a la prensa Rosa López, madre de César Andrés (21) detenido en la U32 de Zapala.
Como se recordará, Andrés es uno de los presos que se escapó de la U11 neuquina, cuando los policías (allí no hay servicio penitenciario) habían dejado de guardia al muñeco apodado “Wilson”. Según militantes de Zainuco los uniformados prepararon las condiciones para esa fuga para poder reclamar más presupuesto.
En la conferencia de prensa, convocada por los familiares de Andrés y Zainuco hablaron también Santiago Nabaes y Gladys Rodríguez, abogado y referente de la organización humanitaria, respectivamente.
A su turno, Nabaes, sostuvo que: “Una de las personas que está golpeada con César es Ramón Mansilla, testigo fundamental contra los 28 policías acusados de torturas de la U11. Cabe destacar que esto fue un episodio sumamente confuso, la primera versión de la policía fue “motín”, luego “fuga”, dijo el abogado refiriéndose a la represión sufrida por ambos presos.
Más adelante, Nabaes indicó que “Hace más de un mes y medio que venimos tratando de resguardar a César Andrés. Acudimos al Poder Judicial, presentamos hábeas corpus pero hasta ahora no hicieron nada para proteger a los detenidos”.
Por su parte, Gladys Rodríguez subrayó que: “desde el gobierno, desde el Estado, no hay respuestas. Nosotros denunciamos que estos son campos de concentración y tortura, tenemos una demanda al Ejecutivo ante el poder judicial, que está en este momento en la Tribunal Superior de Justicia, desde 2006; una petición a la Comisión de Derechos Humanos de la Legislatura reclamando que se tome intervención. Estos son como los campos de concentración de la dictadura. Ellos dicen que no hay “buzones” y todos sabemos que sí, que están en todas las cárceles. Y nosotros seguimos sin poder entrar, nos niegan ese derecho y por eso vamos a seguir esta lucha. Porque si es como ellos dicen que no son campos de concentración, ¿cuál es la razón por la que no podemos entrar?”, se interrogó Rodríguez.
AW

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