Esta decisión fue tomada el viernes en el distrito de Karak, en la conservadora provincia de Jiber Pajtunjwa, fronteriza con las regiones tribales de Afganistán.
Una fuente del gobierno en Karak, por teléfono a la AFP, Maulana Mirzaqeem, miembro del clero confirmó la decisión: “Hemos decidido que las mujeres no irán al bazar sin un pariente de sexo masculino”.
En Pakistán, las amenazas de los talibanes y los tabúes privaron a millones de mujeres de sus derechos. En la mayor parte de las zonas tribales del noroeste, las mujeres están encerradas en sus casas y no salen ni para trabajar ni para hacer compras.
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