Berni manifestó esta mañana que: “Sabemos del sacrificio, del coraje de este grupo de hombres, que con mucha humildad se ha puesto al servicio de los cientos de voluntarios que han concurrido a atender esta tragedia”.
“Una vez más, la misión fue cumplida, a pesar de la frustración por no poder encontrar a los que estaban desaparecidos con vida”.
“También sabemos que dentro de tanto dolor podemos llevarle a sus familiares la paz de saber que han encontrado a sus desaparecidos y les pueden dar la sepultura que corresponde”.
El jefe de los rescatistas, Ángel Poidomani, se refirió a los riesgos vividos en medio de las tareas realizadas durante toda la semana pasada: “Sabíamos que podía colapsar todo, pero eso no nos hacía bajar los brazos”.
“No esperaban el aplauso de toda la gente de Rosario, en esa ciudad fueron tratados como uno de ellos”.
A las 19:45 de este lunes sonaron durante varios minutos las sirenas de los bomberos en la zona donde ocurrió la trágica explosión, en señal de que habían concluido las tareas de rescate y en medio de aplausos de los presentes.
También, se vieron escenas de mucha emoción, con bomberos y rescatistas que se retiraban del lugar con lágrimas en los ojos, luego de finalizar una tarea que les demandó varios días de esfuerzo en la búsqueda de las personas ausentes.
Decenas de vecinos se concentraron de manera espontánea para vivar a los servidores con aplausos permanentes, mientras eran recibidos con abrazos y distintas muestras de afecto.
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