Según comunicó este martes la agencia Interfax: Fuentes policiales informaron que los 30 activistas de Greenpeace detenidos en Rusia por participar en una acción de protesta en una plataforma petrolífera en el Ártico van a ser inculpados el miércoles por ‘piratería’ (…) en banda organizada”.

Entre los detenidos se encuentran  los argentinos Camila Speziale y Hernán Pérez Orsi y la bióloga brasileña Ana Paula Maciel  de 31 años.

Un portavoz del Comité de investigación confirmó a la AFP que: “los activistas serán inculpados el miércoles pero se negó a precisar los cargos”.

Los treinta activistas que participaron en la acción en el Ártico,  26 extranjeros y 4 rusos,  fueron puestos en detención preventiva el 19 de septiembre hasta el 24 de noviembre, acusados de ‘piratería’, un delito pasible de hasta 15 años de prisión.

Los activistas niegan las acusaciones de ‘piratería’  e insisten en que “su acción de protesta contra la plataforma de Gazprom en el Ártico era pacífica” y acusan a Rusia de “haber tomado por asalto su barco ilegalmente en aguas internacionales”.

Según declaró el presidente ruso Vladimir Putin: “los activistas  no eran piratas  pero  violaron el derecho internacional”.

Irina Païkatcheva, responsable de una comisión de vigilancia penitenciaria, que visitó a los militantes en detención preventiva en Múrmansk (noreste), dijo este martes que: “los activistas están casi en  estado de shock”.

“Muchos de ellos están casi en estado de shock. No entienden de qué son acusados. No podían imaginar que habría estas consecuencias tras una acción pacífica en un país democrático”.