El inglés Craig Evans de 24 años quiso enviarle una invitación a su novia a través de su celular, para mantener relaciones sexuales, con un lenguaje erótico. El joven le preguntó a su amante si le gustaría tener sexo con él, “piel con piel” y si le gustaba que fuera “rápido o lento”.
Pero todo resultó una pesadilla cuando sin querer envió el mensaje a través de Blackberry Messenger y llegó a todos sus contactos, incluyendo dos niñas de 13 y 14 años, que eran sus alumnas de natación.
No solo se vio abrumado por la vergüenza que significó que su familia leyera el mensaje, sino que los padres de las niñas hicieron una denuncia, porque entendieron que Evans estaba incitando a las niñas a participar en una relación sexual.
El profesor fue arrestado y debió enfrentar cargos en su contra. Fue condenado a 18 meses en prisión en julio pero recientemente su abogado presentó una apelación y los jueces entendieron el error del joven y terminó liberado.
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