CORRIENTES, 15 Jul. 11 (ACI).-
El Arzobispo de Corrientes, Mons. Andrés Stanovnik, alentó a las miles de familias que empezaron a llegar este viernes 15 de julio al Santuario de Nuestra Señora de Itatí, ubicado en su jurisdicción.
Según informa la agencia católica argentina AICA, "la tradicional caravana de caminantes, carros, carretas, jinetes y vehículos" comenzó el martes la 111ª Peregrinación de San Luis del Palmar a Itatí y las primeras columnas comenzaron a llegar el viernes bajo el lema "Familia peregrina y tradición salvan la vida".
En un mensaje, Mons. Stanovnik recordó que "la familia peregrina tiene su origen y su destino en Dios. Ella es la imagen más bella del amor que hay en Dios. Por eso, cuando la familia peregrina hacia la Casa de Dios, ella se reencuentra con su vocación y con su misión".
"La otra gran verdad es que la tradición, que se renueva cada año en esta espectacular caravana, comunica un tesoro único e irreemplazable de valores, entre los cuales está la familia y el matrimonio entre un varón y una mujer. Sólo la verdadera comunión entre ellos, el respeto mutuo, la sacralidad de la vida y el trabajo, podrán asegurar un futuro que permita el progreso y el bienestar para todos", subrayó.
En una carta al párroco de San Luis del Palmar y a los devotos, el Arzobispo recordó que "la peregrinación es un tiempo extraordinario para el silencio, la oración y para reconciliarse con Dios. El largo camino que recorre el peregrino es un tiempo favorable para que revise su propia vida y dé gracias a Dios por la inmensa ternura de su amor".
"Al mismo tiempo, es una buena ocasión para recurrir al sacramento del Perdón. La paz, la alegría y la fraternidad entre los hombres nacen de la reconciliación de la persona con Dios. Por eso, el verdadero peregrino se confiesa y participa de la misa durante la peregrinación y luego en el santuario", explicó.
"Recemos por la familia y la vida, por nuestra patria y por sus gobernantes, por aquellos que deben legislar sobre la vida del niño por nacer, para que nunca lo hagan en contra de él ni de la madre, y con sabiduría lo hagan respetando la vida de ambos y a favor de todos los que padecen necesidades", agregó.
El Arzobispo de Corrientes, Mons. Andrés Stanovnik, alentó a las miles de familias que empezaron a llegar este viernes 15 de julio al Santuario de Nuestra Señora de Itatí, ubicado en su jurisdicción.
Según informa la agencia católica argentina AICA, "la tradicional caravana de caminantes, carros, carretas, jinetes y vehículos" comenzó el martes la 111ª Peregrinación de San Luis del Palmar a Itatí y las primeras columnas comenzaron a llegar el viernes bajo el lema "Familia peregrina y tradición salvan la vida".
En un mensaje, Mons. Stanovnik recordó que "la familia peregrina tiene su origen y su destino en Dios. Ella es la imagen más bella del amor que hay en Dios. Por eso, cuando la familia peregrina hacia la Casa de Dios, ella se reencuentra con su vocación y con su misión".
"La otra gran verdad es que la tradición, que se renueva cada año en esta espectacular caravana, comunica un tesoro único e irreemplazable de valores, entre los cuales está la familia y el matrimonio entre un varón y una mujer. Sólo la verdadera comunión entre ellos, el respeto mutuo, la sacralidad de la vida y el trabajo, podrán asegurar un futuro que permita el progreso y el bienestar para todos", subrayó.
En una carta al párroco de San Luis del Palmar y a los devotos, el Arzobispo recordó que "la peregrinación es un tiempo extraordinario para el silencio, la oración y para reconciliarse con Dios. El largo camino que recorre el peregrino es un tiempo favorable para que revise su propia vida y dé gracias a Dios por la inmensa ternura de su amor".
"Al mismo tiempo, es una buena ocasión para recurrir al sacramento del Perdón. La paz, la alegría y la fraternidad entre los hombres nacen de la reconciliación de la persona con Dios. Por eso, el verdadero peregrino se confiesa y participa de la misa durante la peregrinación y luego en el santuario", explicó.
"Recemos por la familia y la vida, por nuestra patria y por sus gobernantes, por aquellos que deben legislar sobre la vida del niño por nacer, para que nunca lo hagan en contra de él ni de la madre, y con sabiduría lo hagan respetando la vida de ambos y a favor de todos los que padecen necesidades", agregó.
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