lunes, 21 de noviembre de 2011

Alfonsín, el mariscal del papelón, fue arrojado por la ventana.


Gerardo Morales, jefe de la bancada radical del senado, aclaró que su intención no es presidir el bloque a costa de cualquier cosa, sino que “se debe lograr un consenso entre todos los senadores”. 
De esta forma, declaró que “no es necesario que yo presida el bloque de senadores. Voy a priorizar el consenso con todos los senadores y una conducción que integre a todos con una agenda importante”.
En sus declaraciones se refirió al inconveniente que tuvo con el ex legislador Leopoldo Moreau y a la Convención de la UCR que culminó con incidentes y en un escándalo. Así, afirmó que “se empezó a generar en un debate, pero particularmente lo que le estábamos refutando es que ha habido un planteo cuasi oficialista que ha planteado la revisión del radicalismo en el Congreso” y agregó “ha sido una muy buena convención, ha habido un arduo debate. No somos un club de señoritas. Con Moreau no pasa nada, se molestó por cosas que he dicho”.
Por otra parte, explayó algunas declaraciones sobre el rol del radicalismo en el Congreso, expresando que “siempre hemos votado con alternativas. Tenemos propuestas para el Presupuesto, somos los que impulsamos el debate de las prepagas cuando el Gobierno tenía un acuerdo con las corporaciones, tenemos pendiente la ley de acceso a la información pública y la modificación del Indec”.
“Reivindico la actitud que ha tenido el radicalismo en el Congreso. Somos lo que impulsamos la Asignación Universal por Hijo. Estamos frente a un Gobierno que tiene un bolsón de corrupción y ahora lanza un plan progre pero que ha subsidiado a los ricos” manifestó el senador.
El desafío de la UCR es mantener la representación social que se puso en crisis luego e la derrota electoral. Finalmente, precisó que el radicalismo “va a sostener el criterio de ser firmemente opositores y responsables con el Gobierno nacional”.

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